Estos días me he encontrado con un vídeo que refleja, en apenas unos segundos, la enorme tristeza de una persona. Soy seguidor de la NBA desde pequeño, y recuerdo la historia de Greg Oden, estaba destinado a ser uno de los pivots dominadores de la liga, fue número uno del draft, por delante de actuales estrellas como Kevin Durant, y comparado con cracks de la talla de los míticos Bill Russell o Shaquille O’Neal, pero debido a las lesiones y a una mala gestión mental, no llegó a ser lo que se esperaba.
Os dejo a continuación el vídeo, en él se ve la reacción de Oden a una afirmación de una abuela, una señora famosa en los Estados Unidos. Un solo comentario y la tristeza que Greg Oden guarda todavía en su interior sale a flote.
Puedo vencerte!! le decía la señora, y el cambio en la cara de Oden es espectacular. En unos segundos, Oden vuelve a revivir una vida dedicada al baloncesto, unas actitudes físicas para ser el mejor, sus lesiones, recuperaciones y nuevas lesiones, para sentirse de nuevo derrotado. No puedo evitar sentirme apenado cada vez que veo este vídeo, el dolor marcado en la cara de un Oden que, sin embargo, sigue combatiendo.
Greg Oden sigue dedicando su vida al baloncesto, es entrenador ayudante en la Universidad de Ohio State.